A nadie ha de sorprender la gran popularidad que el agapornis poseen al día de hoy, esto es gracias a que es uno de los pájaros más hermosos y simpáticos del mundo, Existen muchas variedades de la misma, Entonces, ¿cuál es la mejor elección para mí? Sí?, si no tienes mucha experiencia con aves, el agapornis pullarius es la opción perfecta para ti.
No se sabe de su procedencia
Aunque no sabemos en donde se originó por primera vez este agapornis, lo cierto es que esta fue descubierta en 1758 donde adquiere su característico nombre agapornis pullarius, gracias a uno de sus rasgos únicos este usualmente también es llamado como agapornis carirroja por su cara rojiza.
Entre las características especiales de esta ave se pueden apreciar su forma de caminar, está al ser bastante única ha hecho que el animal sea de los menos populares de esta especie. Durante un tiempo estas aves fueron muy comunes en países como Inglaterra y Holanda, pero debido ala baja tasa de reproducción la gente de occidente fue perdiendo el interés en este ejemplar.
¿Con qué características cuenta?
Entre las más destacables está su tamaño, es una de las variedades de agapornis más pequeñas que existen midiendo unos 14 centímetros y no llegando a pesar más de 50 gramos. Otro aspecto al destacar es que al igual que el agapornis canus (o cana) el pullarus es de naturaleza alegre, por lo que este explorara y curioseara en busca de cosas nuevas a su alrededor, esto pasa en gran medida cuando este ha nacido y se ha criado en cautiverio. Este caso no aplica cuando se trate de una ave salvaje que ha sido capturada, ya que esta se mostrara asustadiza y quisas no se adapte a encontrarse encerrada.
Cuando nos centramos en el plumaje del ave en la mayoría de su cuerpo es casi siempre de color verde, con excepción de su cara, puesto que esta puede tener un tono rojo anaranjado. Sus plumas en el abdomen y las infracobertera con un tono amarillento, mientras que el área de sus alas contienen un tono negro. La rabadilla es de color azul claro y su cola es verde. Con unas patas grises, un pico rojo anaranjado y el iris de tonalidad marrón También oscura. También se pueden encontrar mutaciones como la del agapornis pullarius ugandae, este cuenta con una rabadilla de color azul pálido.
En esta especie es más fácil diferenciar al macho de la hembra porque esta presenta dimorfismo sexual, el mismo no es tan pronunciado. Un ejemplo claro de esto son los colores que aunque similares al del macho, la hembra presenta un color más anaranjado en la zona de los ojos, la principal diferencia la encontraremos en el color de las infracoberteras alares que son de color verde a diferencia de las del macho que son negro.
Cuando estas aves son jóvenes y están en crecimiento, el color y tonalidad de sus plumas es más tenue por lo que estos podrían parecerse mucho a las hembras, esto hace que sea bastante difícil diferenciarlos cuando en el proceso de crecimiento. Al crecer los colores de del macho cambian en las infracorbetera de verdosos a negro.
¿Por qué es adecuado elegir esta especie, y no otra?
Si bien muchas personas se han rendido a la hora de criar esta ave por lo difícil que les resulto reproducirlos. Sin embargo, difícil es, pero no imposible además de que es uno de los mejores animales que podríamos tener como compañía gracias a su personalidad alegre.
Son aves bastante dóciles, esto no cambia si están en pareja o en celo, estas evitan estar cerca de otras aves. Les encanta bañarse en fuentes o tinas improvisadas dentro de la jaula y que les acaricien su lomo, estas demuestran su felicidad haciendo movimientos suaves de cabeza. Cuando hablamos de su alimentación esta debería ser compuesta por semillas de hiervas, bayas, plantas y algunas especies de frutas, estas adoran las semillas género sorghum pero también las frutas como las guayabas e higos silvestres.
Dependiendo de la zona donde este pájaro se encuentre su estación de cría podría cambiar. Un ejemplo claro de esto es en África donde su temporada de cría empieza en abril y va finalizando en octubre. Este proceso ocurre después de que el macho corteja a la hembra y entran en estado de apareamiento, a los 20 días la hembra estaría poniendo sus huevos. Su nido debería tener buen tamaño esto es debido a que esta podría poner entre 3 a 5 huevos.
Si decidimos sacarlo de la jaula, el proceso debería realizarse con mucho cuidado y solo si el ave tiene la confianza suficiente con su dueño, esto es debido a que al ser una ave bastante alegre y curiosa querrá volar y explorar las zonas más cercanas, esta puede ser un poco asustadiza si tratamos de atraparla fuera de su jaula por lo que solo debemos tomar medidas para que no se escape e incentivarla con comida en su jaula para que vuelva por sí sola.
